PRIDE

Ya no se sabe cuántas siglas se necesitan para lograr que todo aquel que aun no descubre su razón de ser, se sienta identificado durante su proceso.

Entiendo que es natural que como humano, tenga la necesidad de sentirse aceptado por terceros, pero, cada vez somos menos a los que nos importa qué y cómo te guste. Pero, también, cada vez son más los que quieren que nos importe. Créeme, no nos importa. Desde pequeños se les ve su interés por cosas que a uno no le atraen. Muchos desde los cinco o seis añitos, se le nota lo que va a ser de grande. Pero en serio, no nos importa.

En tu casa lo debiste de haber notado. A cuántos niñitos que conoces se les veía su interés y terminaron siendo abogados? Si, desde niños se entusiasman por ser jefes de grupo, participando en debates. Uno de padre hasta dice: “Este va a ser abogado, de todo alega” Igual pasa con el comunicador, o el músico, se les ve, se les ve.

Cómo te quieras ver, nombrar, o percibir, mientras te aceptes tú, dale. Vive. El permiso nunca lo haz necesitado y la libertad siempre la haz tenido, dale! Créeme, nadie es tan importante. Tanta protección al falto de vivencias nos está llevando a una sociedad muy frágil.

Siente el PRIDE, siéntete orgulloso de lo que te interesa, de lo que te gusta y de lo que disfrutas.

Que tengas un excelente cierre de semana, en cualquier rincón de la ciudad que te encuentres, gracias amigo lector.